Ha hecho falta un mes para salir de Eindhoven y, que mejor manera de explorar Holanda que ir a Amsterdam. Una ciudad preciosa donde gente de todo el mundo va a fumar y a ver a las putas en los escaparates. Poco os puedo decir de AMSTERDAM que no sepais, pero lo mejor es la sensación de perderse por sus calles llenas de gente de todo tipo y sentirte rodeado de canales por los que no paran de pasar barcos de todos los colores. La marihuna se huele en cada esquina y el barrio rojo te estremece al ser único en un país donde impacta tener tanto vicio rodeado de tanta elegancia. Hoy solo a sido un paseillo por la ciudad. En el tiempo que me queda descubriré los demás secretos de un lugar donde hay mucho más que un paraiso legal de drogas y sexo a la carta.
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